El bosque o la selva de Irati (Iratiko oihana en euskera) es un bosque repartido entre el norte de Navarra (España) y los Pirineos Atlánticos (Sola y Baja Navarra) en el suroeste de Francia.

Por su parte española está situada en el valle del río Irati, entre los montes de Orzanzurieta y Roncesvalles al oeste, y el monte Orhi al este. El límite sur lo pone la imponente mole de la Sierra de Abodi. Los principales accesos son por el oeste por Orbaiceta (Valle de Aézcoa) y por el este por Ochagavía (Valle de Salazar).

Se trata de la mayor masa forestal de Navarra y uno de los mayores y mejor conservados bosques de hayas (Fagus sylvatica) y abetos (Abies alba) de toda Europa. A pesar de ser un bosque explotado forestalmente desde los siglos XVI-XVII, el respeto y el buen hacer de los habitantes de estos valles ha hecho que se conserve en total plenitud. Existen dentro de la zona diversos espacios protegidos: todo el Irati es una ZEPA (Zona de Especial Protección de Aves), así como zonas protegidas como Reserva Natural o Reserva Integral del total de 17.000 ha del bosque.

Nuestro paso por Irati empezó haciendo una preciosa y corta ruta que comienza en el parking de las casas de Irati y que nos lleva a lo largo del Río Irati hasta la Cascada del Cubo.

Como veis Irati en otoño es un espectáculo visual para los sentidos.

Continuamos nuestra visita por la Selva de Irati haciendo el Sendero de Morterutxo que nos lleva al Embalse de Irabia.

A la vuelta no pudimos resistirnos a pararnos para fotografiar estos bellos paisajes otoñales.